Baauer | Razzmatazz
Casi cuatro años después del lanzamiento de Harlem Shake, el tema que le posicionó como fenómeno global, Baauer lanzó su álbum de debut, Aa, a través de LuckyMe. Fue el pasado marzo y esta estrategia sólo puede interpretarse como una manera de pasar página, de no tirar por el camino fácil, emborracharse de éxito y firmar por una major para perder toda identidad. En el disco, Harry Bauer conectaba con una serie de artistas de rabiosa actividad – M.I.A, Future, Pusha T, Rustie, Novelist – dando como resultado un trabajo extremadamente ecléctico, en el que cabía R&B, trap inteligente, funk, hip hop codeínico, breaks…
Como Javier Blánquez señalaba en la crítica que publicamos en su momento: “La mezcla de exotismo y gueto es quizá el juego de equilibrios que sostiene en todo lo alto el álbum de Baauer: en Body juega al R&B ambientado en una película de ciencia ficción, y en Pinku contrasta un bajo funk al estilo Chic con samples de conversaciones en japonés, un momento muy Daft Punk seguido de crunk en Sow y de grime en Day Ones, un pelotazo al estilo The Bug en el que colaboran Leikeli47 y Novelist”.
El productor de Filadelfia ha escogido Razzmatazz como única parada en España de su gira europea. Un club que le ha visto crecer: estuvo en 2013 cuando el Harlem Shake aún hacía mucho daño, un año después en una fiesta enmarcada en el ciclo Razz & Bounce y en 2015, más o menos por estas fechas, en una noche auspiciada por Trill, responsables de su vuelta al templo barcelonés. Será este viernes 11 de noviembre.
Volviendo a la crítica de Blánquez: “el descastado demuestra que ha sabido crecer, que no fue un tonto con suerte -no será lo suyo trap inteligente, pero sí que es trap con inteligencia-, y que a partir de aquí hay mucho futuro”. ¿Y qué mejor que demostrar su proyección en un club tan avanzado como Trill?
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