Esta bodega llamó nuestra atención cuando creó el Techno-Tinto (www.vinohuha.com), el primer vino de Chimo Bayo. Una elaboración creada con uva bobal bajo el método “está sí, está no, esta me gusta me la como yo”.
Pero al margen de esta original creación, Bodegas Arráez se ha convertido en una de las bodegas más irreverentes del sector enológico patrio. Son unos innovadores empedernidos y aquí no encontrarás el típico vino para estirados. Pasan del snobismo que muchas veces rodea al mundo del vino. Y su lema es, “un vino es algo que debería poder disfrutar todo el mundo, a cualquier hora y en cualquier sitio”. ¿Por qué no podríamos beberlo en un club o en un after?
En esta bodega valenciana son atrevidos y les gusta vivir la vida, pero tienen claro que ser diferentes no está reñido con hacer bien las cosas. Encontramos entre sus vinos etiquetas tan divertidas como Mala Vida y Vividor, o elaboraciones más curradas como Los Arráez Parcela 0 y Bala Perdida.
Pero en BeatBurguer nos vamos a quedar con algo tan típico de la escena de club como es Vivir Sin Dormir. Una tentación difícil de rechazar cuando encuentras un buen after y a tu Dj favorito. En Vivir Sin Dormir encontramos un vino 100% Monastrell Ecológico de Jumilla con 4 meses de barrica. Una elaboración con gran personalidad que acompaña perfectamente a la cocina mediterránea y aconsejan servirlo en la mejor compañía. ¿Podría ser en tu after favorito?
