Our Love

La carrera de Dan Snaith, ya sea como Manitoba o como Caribou, siempre había ido en ascenso. Por lo menos hasta Swim, su vibrante y sobresaliente trabajo que editó en 2010 y que le acercó a las pistas de baile sin perder esa sensibilidad pop que siempre se ha escondido detrás de su música. Ese laureado y aplaudido álbum significó un antes y un después en la carrera del canadiense, pero lejos de dejarse arrastrar por el éxito y sentirse obligado a darle rápidamente continuación, se decidió a crear un nuevo alias: Daphni, en el que en los últimos años ha dado rienda suelta a su pasión por la música de club. En JIAOLONG, el sello que creó para la ocasión, han salido maxis de una calidad excelsa, pero tarde o temprano tenía que llegar un nuevo trabajo con su pseudónimo más conocido. Ahora City Slang nos trae Our Love, hilvanado con calma, cuatro años después de su predecesor, sin las prisas que te pueda imponer el mercado.

Y empieza de la mejor manera posible, con un himno bailable a la altura del ya a estas alturas algo sobado Odessa. “Can’t Do Without You” es un corte que nos habla indudablemente del amor, como el propio nombre del álbum nos indica. Es el hilo conductor de estas diez piezas (como lo ha sido a lo largo de toda su carrera). Pero lejos de resultar ñoño, Dan Snaith consigue dar con un cancionero la mar de sofisticado en términos de producción. El gusto por la melodía se mantiene, pero quizá no tanto la voz. Quizá por eso llamó a su compatriota Jessy Lanza para que colaborara en “Second Chance”, un tema en el que la influencia R&B es más que notoria. Pero no es la única que colabora aquí. También Owen Pallett, miembro intermitente de Arcade Fire, presta su violín. “Our Love” es, sin duda, variado, pues va del house al trap sin inmutarse. Su tema titular es un homenaje perfecto a los tiempos de Inner City y reclama a gritos un remix para engrandecerlo aún más si cabe.

Hay algún tropiezo, sí, Julia Brightly, titulada en honor a una fallecida técnica de sonido, no parece muy bien hacia donde va y parece haber estado cocinada a medias. Y “Silver” son cinco minutos de tostonazo repetitivo que no acaban de encajar en el contexto de este álbum. Las flautas de “Mars” molan sí, pero no sabemos muy bien si estamos ante un tema de Caribou o Daphni. Pero se lo perdonamos todo por terminar por todo lo alto con ese pelotazo afro que es “Your Love Will Set You Free”, quizá donde mejor podemos disfrutar de esa voz de Dan Snaith que tanto reclamamos que asome. No es un trabajo menor en su discografía ni mucho menos, pero si se compara con su predecesor es evidente que palidece. También es cierto que de haber salido a principios de verano lo hubiésemos disfrutado más que ahora, en pleno octubre.