GHB: una mierda que no deberías tomar nunca

Una de las peores drogas que puedes tomar. Reflexionamos sobre el GHB (el mal llamado “éxtasis líquido”): una basura que te puede dejar la cabeza como una pelota de trapo -en el mejor de los casos- o provocarte la muerte mientras bailas ese techhouse trotón que tanto te gusta.

Antes que nada advertirte que ni somos tu madre ni lo queremos ser: tampoco somos policías, jueces o del Plan Nacional Anti Drogas. Simplemente somos un grupo de ancianos que lo hemos probado todo (sí, todo) y que, como venerables abuelitos desde el sofá orejero, te vamos a dar un charlita. Así que pasa, sientáte (aparta el tapete de ganchillo del sofá para no mancharlo) y escucha a tus mayores.

El GHB es un potente depresor del sistema nervioso central que, en un principio puede producir sensación de bienestar y euforia pero luego resulta que no. Es conocido también como “éxtasis líquido”, aunque sus efectos no tienen nada que ver con el éxtasis, que es un estimulante y no una droga depresora como el GHB. En la calle circula en forma de líquido transparente y se consume por vía oral generalmente mezclado con agua, por lo que es difícil controlar la dosis consumida y las variaciones en cantidad o pureza producen efectos muy diferentes. Los efectos del GHB varían mucho de una persona a otra. Empiezas a notar el lote generalmente a los 10 ó 20 minutos, el efecto dura entre una hora y hora y media y desaparece por completo a las 3 ó 4 horas.

Aunque los efectos buscados son el aumento de la sociabilidad y de la capacidad de comunicación (crees que te estás tomando una pirula líquida pero no es así) el GHB provoca somnolencia, obnubilación, dolor de cabeza y te lleva a un estado de confusión generalizado. Pero si eres un inconsciente y lo mezclas con alcohol te llevará directamente a este cuadro clínico: depresión respiratoria, delirios, alucinaciones y coma: sí, coma. Mezclado con alcohol o no tendrás insomnio, temblores -un pulso no apto para robar panderetas-, sudoración brutal y ansiedad.

Algunos camellos también venden GBL (Gamma Butiro Lactona) que con estructura muy similar al GHB, (y que el organismo humano transforma en este mismo), provoca idénticos efectos. Ambos han sido relacionados ya desde principios de los años 90 con las denominadas “agresiones sexuales inducidas por drogas”, es decir, algunos hijos de puta lo utilizan para aturdir a las mujeres y luego abusar sexualmente de ellas. Es por eso que siempre os recomendamos que las copas que os tomáis en el club siempre estén en vuestra mano, para evitar que cualquier malnacido os ponga mierdas en ella en contra de vuestra voluntad. Los botes se hicieron muy populares en los 90 en España, especialmente en los clubs gays, donde se mezclaba impune y descerebradamente con popper (no lo hagas en tu vida). El bombazo en la cabeza es directo y la mezcla de ambas cosas produce una sensación similar a la heroína en vena: el lotazo es brutal. La sensación de bienestar es incluso mejor que después de follar, pero te arriesgas a morir. Sí, así de claro: si mezclas estas dos mierdas puedes tener una parada cardio-respiratoria que te puede llevar al coma o directamente a la muerte.

En el caso de que quieras probar el GHB (ácido gammahidroxibutírico) te vamos a dar los siguientes consejos: planifica bien la noche. De entrada cena bien, no puedes salir por ahí de fiesta con una tostada y una loncha de pavo en el cuerpo. El GHB cae en el estómago como una bomba de nitroglicerina. Si puede ser evita tomar alcohol y tampoco abuses de las bebidas energéticas ya que también te alterarán el ritmo cardíaco. Bebe agua y refrescos con azúcar para evitar bajonas de tensión. La hidratación no sólo es cuestión de belleza, en este caso es cuestión de supervivencia. Como ni eres químico ni tampoco lo vas a ser no te hagas el chulito: dosifica el bote. Si es tu primera vez no te lo metas entero, tómatelo en tres veces, alternando las tomas cada hora con abundante líquido. Es preferible quedarse corto y repetir que no que te mueras en la primera toma por meterte en bote del tirón. Fíjate bien en el vídeo bajo estas líneas.

Empezarás a notar la gustera al poco rato. Te notarás en el limbo, hablarás y socializarás con gente que, yendo en estado normal cruzarías de acera para no tener contacto ni siquiera visual con ellos. Puesto de GBH hasta serías capaz de socializar con Hitler y ver que “es un buen chaval”. Vas a estar tan puesto que ni siquiera bailarás. Si ves que te apalancas en los sofás del club (¿aún hay sofás en los clubs? ¿Hola? ¿Tenemos 85 años? Sí, tenemos 85 años) y se te quedan los ojos en blanco ya puedes pedir por lo que más quieras en este mundo que alguien llame a una ambulancia: tienes los primeros síntomas de una parada cardio-respitaroria que si no se coge a tiempo te llevará indefectiblemente a la muerte. Y no hay nada más triste en esta vida que morir en un club, donde se supone que has ido a pasartelo bien. Si vais en grupo y sois varios los primerizos te recomendamos repartir el bote en tres bebidas. Tienes que ser muy muy campeón para mezclar GHB con otras drogas: ni se te ocurra. La mezcla podría ser letal.

Si ves en un club a algún tipo que está poniendo cosas en copas ajenas (ya sea en la barra o en la pista) llama directamente a seguridad y comunica lo que está pasando. Generalmente este tipo de infraseres hacen estas cosas para abusar de mujeres e incluso violarlas. El GHB es tan potente que se dan casos de orgasmos por el tacto: sí, hay gente que se corre nada más tocarles. Por eso e muy importante que no lo mezcles con nada, insistimos: ni si quiera con alcohol. No tomes GHB solo, siempre hazlo en compañía (esto no es el típico porrito que te fumas en el balcón de casa de tus padres aprovechando que se han ido a comprar). En los 90 varios compañeros del que os escribe esto murieron asfixiados por shock, y eran personas habituadas a consumir todo tipo de drogas, así que imagínate si es tu primera vez y te pasas con los botes.

Lo de siempre: utiliza la cabeza para algo más que para llevar esa gorra tan chula que te has comprado en las rebajas. Si te quieres a ti mismo (aunque sea solo un poquito) no deberías probar esta mierda nunca. La vida, incluso con ese techhouse trotón que tanto te gusta, puede ser maravillosa sin tener que tomar esta basura. Lo que cuenta siempre es disfrutar, y con el GHB no lo vas a hacer nunca.