Techno sentado, el futuro clubber es una pesadilla

Si este es el futuro clubber que nos espera, nos bajamos. Y es que hoy conocemos de un club holandés, el Doornroosje, que celebró el pasado fin de semana una fiesta llamada Social D(ist)ancing en la que seis DJs pincharon en sets de 20 minutos para un público de unas 30 personas. Todas ellas estaban sentadas en sillas separadas por un metro y medio de distancia en consonancia con la normativa de seguridad implantada en Países Bajos (y muy similar a la española en esta fase 3). En principio, el público ni se podía levantar ni se podía juntar, pero en algún momento inclumpieron las normas al ritmo de la música.

No se vendieron todas las entradas (a 10 euros más consumición), pero la experiencia fue relativamente exitosa: fue retransmitida online y los organizadores esperan ampliar a 100 plazas a partir de julio.

Algo más de éxito tuvieron las sesiones que organizó DJ Bone, repartidas en dos turnos de 20 a 22 horas y de 23 a 1 de la madrugada. Solo pudieron asistir 30 personas y agotaron entradas. Al parecer, la cabina del dj contó con un sillón y en la pista de baile había sillones y sofás para el público. Habrá nuevas entregas.